El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, anunció este martes que las fuerzas armadas de Rusia han iniciado la siguiente fase de la operación militar especial en Ucrania. El canciller declaró a medios internacionales que: “La operación en el este de Ucrania tiene como objetivo; como ya se anunció, la liberación completa de las repúblicas de Donetsk y Lugansk. Esta operación continuará, la siguiente fase de esta operación especial está comenzando ahora”.
De igual forma, Lavrov añadió que esta fase resulta fundamental y clave en el desarrollo de la operación militar especial. En la misma, las fuerzas armadas se disponen a emplear exclusivamente armas convencionales.
Asimismo, el alto diplomático aseveró en referencia a la autodeterminación de Ucrania que: “Queremos que los ucranianos decidan por su cuenta cómo quieren seguir viviendo. Queremos que la gente tenga libertad de elección”.
Previamente, el gobierno ruso ha enfatizado que cumplirá cabalmente los objetivos planteados inicialmente en la operación especial. Ratificó que las instalaciones militares constituyen únicamente los puntos de la ofensiva. El Ministerio de Defensa de Rusia retomó la proposición a los efectivos del ejército ucraniano. Estos permanecen en la planta metalúrgica Azovstal de Mariúpol para que depusieran las armas.
En este sentido, el jefe del Centro Nacional ruso de Gestión de la Defensa, el coronel general Mijaíl Mizíntsev, afirmó garantizar “la preservación de la vida y el respeto de todas las normas de la Convención de Ginebra en lo referente al trato de los prisioneros de guerra, como ya ocurrió con sus compañeros que se habían rendido anteriormente en Mariúpol”.
Rusia descartó diálogos mientras ucranianos denuncban nuevos ataques
En marzo, el Kremlin rechazó las esperanzas de un avance positivo en las conversaciones de paz entre delegados rusos y ucranianos que se llevaron a cabo en Turquía. «No podemos declarar en estos momentos que haya habido ningún avance ni nada muy prometedor». Así lo dijo el portavoz de Rusia, Dmitry Peskov, en declaraciones recogidas por la agencia de noticias Interfax.
Se esperan nuevas actualizaciones a lo largo del día por parte de Rusia sobre estas negociaciones. Durante las conversaciones de alto el fuego, Ucrania había propuesto convertirse en un Estado neutral a cambio de ciertas garantías de seguridad.
Rusia dijo que «reduciría drásticamente» los ataques en la capital, Kiev, y en la ciudad de Chernígov, donde, sin embargo, se han reportado nuevos bombardeos. El gobernador regional de Chernígov, VIacheslav Chaus, dijo que las fuerzas rusas llevaron a cabo ataques «durante toda la noche». Eso pese a su promesa de reducir las operaciones de combate.
«En estos momentos, mientras hablamos, puedo escuchar lo que parecen proyectiles», dijo el alcalde desde Chernígov este miércoles. La BBC no ha podido confirmar esta información de manera independiente, pero varios residentes de Chernígov también declararon que los combates continuaban.
Funcionarios ucranianos dijeron que Rusia también está bombardeando casi todas las ciudades en la línea del frente. Eso ocurría en la región oriental de Donetsk, donde se reportan nuevos ataques. Oleksander Danylyuk, exasesor de seguridad nacional ucraniano, dice que Rusia está «reagrupando» sus fuerzas hacia el este.